Ponte en contacto con nosotros si:
- No has visto a tu hijo desde hace mucho tiempo
- El Juzgado de Familia o la Oficina de Protección de Menores han recomendado o exigido un contacto supervisado o protegido
Todo niño tiene derecho a estar en contacto con ambos padres. Todo progenitor tiene derecho y está obligado a tener contacto con sus hijos. Sin embargo, el contacto y el derecho de visita pueden resultar a veces problemáticos. Esto puede ocurrir si existen conflictos graves entre los padres o si uno de ellos adopta un comportamiento que pone en peligro el bienestar del niño (por ejemplo, debido al abuso del alcohol o las drogas). En estos casos, puede ser útil mantener un contacto supervisado por un profesional durante un período de tiempo determinado. Esto permite que los niños se mantengan en contacto con sus padres, incluso en situaciones difíciles.
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